Mar Souto: una abanderada del voluntariado

Hoy os presentamos a Mar Souto, miembro del equipo voluntario de Sonrisas de Bombay en Madrid. Nos encanta contar con ella, por muchas cosas y en esta entrevista lo vais a descubrir: ¡GRACIAS, Mar!

Me llamo Mar Souto Romero, soy profesora de universidad, docente y aprendiz al mismo tiempo, pero muy feliz con mi propósito de vida dando optimismo y firmes creencias de que todo es posible a todos los alumnos que pasan por mis aulas. Al final lo importante es sentirnos merecedores de nuestros sueños.

¿Cómo conociste Sonrisas de Bombay?

En un viaje a Tokio, en el aeropuerto de Madrid, vi el libro de Jaume, Sonrisas de Bombay. Y pensé algún día iré allí. Sin saber en ese instante que mi vida se vincularía para siempre a Bombay, porque me enamoré de Jaume de su proyecto y de su firme creencia de que entre todos podemos contribuir a que este sea un lugar mejor. Además, la ONG de Jaume trabaja a nivel político, social y cultural para velar por los derechos de los colectivos desfavorecidos en la India, especialmente niños y mujeres, los más sensibles.

¿Desde cuándo estás colaborando con Sonrisas de Bombay y cuál es tu labor?  

Desde hace más de 10 años, además de colaborar económicamente, que es lo más fácil, me implico en todas sus causas solidarias. No solo con mi acompañamiento, también dando difusión a toda su labor a través de los medios de comunicación en los que colaboro. Especialmente el programa de radio “Querer comprender” en 107.4 FM y el portal digital de enseñanza superior Ibercampus en www. ibercampus.es

¿Qué te hizo decidirte a colaborar con nosotros? 

La necesidad de devolverle a los que más nos necesitan las oportunidades que he tenido yo. No elegimos nacer donde nacemos, pero ello contribuye a nuestro destino. La solidaridad no es una opción es una obligación moral. Y a cambio ¿qué he recibido? El crecimiento personal, la experiencia de ayudar, el conocimiento de otras personas y realidades, la interculturalidad, el aprendizaje…

Cuéntanos una historia o una actividad de nuestro proyecto que te haya impactado especialmente:

Realmente me llenan todos los proyectos como la campaña sobre la TRATA DE PERSONAS para terminar con la trata con fines de explotación sexual. O el proyecto de SENSIBILIZACIÓN Y EDUCACIÓN PARA EL DESARROLLO denunciando la situación de pobreza, desigualdad y vulneración de derechos que sufren a diario millones de personas.  O cubrir Las NECESIDADES BÁSICAS para que se pueda vivir de manera digna. Pero es verdad que en esta situación de excepcionalidad con el COVID, donde la India ahora mismo es el foco de la necesidad de ayuda, el poder colaborar para poder llevar, aunque sea un respirador más, ya ha valido la pena.

 ¿Qué destacarías de tu experiencia como voluntaria? 

Lo agradecida que estoy por la oportunidad de colaborar. No solo porque soy mejor, si no y sobre todo porque sé que es lo realmente importante. Reorganizas tus prioridades, das valor a lo que realmente vale la pena, y relativizas todo aquello que en nuestro día a día a veces magnificamos y con perspectiva no merece ni un segundo de nuestra vida.

Un mensaje para aquellas personas que aún no se han decidido a dar el paso de colaborar con Sonrisas de Bombay: 

 ¿Quieres cambiar el mundo? ¿Poner tu granito de arena para que mejoren las cosas? ¿Para acabar con el sufrimiento y la injusticia? Pues hazte voluntaria/o. Hay muchos motivos para colaborar con una ONG en forma de voluntariado. Convertirse en voluntario/a quiere decir implicarse, sentirse útil, sentirse parte de algo, sentirse necesario. Estos sentimientos mejoran la autoestima y el concepto de uno mismo, al mismo tiempo que nos ayudan a salir un poco de nosotros mismos/as, suavizar el egocentrismo que reina en nuestras vidas y ser más generosos/as.