Las chicas de LSE también despiden el curso

Antes de finalizar esta edición de Life Skills Empowerment (LSE), el equipo decidió organizar una actividad especial, y apostaron por una actividad para sensibilizar a la comunidad sobre la difícil  situación de la mujer en una sociedad patriarcal.

La actividad consistió en preparar una obra de teatro para interpretar en la calle, en la cual las protagonistas fueron las niñas de LSE. El evento fue un éxito y, además de poner de manifiesto los problemas con los que tienen que enfrentarse las mujeres de comunidades como las suyas, en su día a día, ayudó a las niñas a superar el miedo de hablar sobre temas controvertidos relacionados con la desigualdad de género. Cuando empezaron a trabajar el guión, algunos de los temas como la violencia o los abusos, les hacían sentir incómodas. Pero con este trabajo entendieron que denunciar es el primer paso para acabar con estas situaciones. Además, muchas consiguieron superar el miedo escénico y pudieron sentirse más seguras de sí mismas gracias a la participación en esta actividad.

Algunos días después del evento, tuvo lugar la reunión final de la comisión de  beneficiarios y beneficiarias de LSE, Educación superior y GirlChildEducation, para evaluar el último año. Durante la reunión, que contó con la participaciónde los equipos de los proyectos, de las chicas y chicos, y de sus padres y madres, todos tuvieron la oportunidad de opinar y debatir sobre los contenidos del programa y sobre los resultados de las actividades llevadas a cabo en el marco de estos proyectos a lo largo del año.

Las impresiones sobre el proyecto LSE fueron, en general, muy positivas. Según las familias, la parte más valiosa del proyecto es la orientada a la salud, ya que a menudo temas como la sexualidad o la menstruación no se tratan de manera clara y pedagógica. Hay muchos tabús,  y la información completa y de calidad es considerada un valor por las familias. Subrayaron que no solo las chicas se benefician de estos conocimientos, también lo hacen el resto de miembros de sus familias.

Las chicas, en cambio, agradecieron sobre todo las actividades durante las cuales pudieron desarrollar sus habilidades personales, tales como la comunicación, la gestión de tiempo y del estrés, entre otras. A muchas de ellas, estas sesiones les las han ayudado visiblemente a gestionar mejor sus relaciones interpersonales y su capacidad de enfrentar todo tipo de situaciones que ocurren en su vida cotidiana.

Nos alegramos mucho de haber recibido todos los comentarios positivos, pero también de haber resuelto todas las dudas y de haber compartido sugerencias de cómo mejorar nuestro programa. Sin duda vamos a aplicarlas en la siguiente edición del proyecto, para poder luchar cada vez más eficazmente contra todo tipo de desigualdades con las que tienen que enfrentarse las comunidades con las que trabajamos.