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La segunda ola: Jaume Sanllorente nos informa desde Bombay
Las últimas semanas, la India ha afrontado uno de sus peores y más graves momentos. La segunda ola de la pandemia del coronavirus, bastante inesperada por el conjunto de la sociedad y las instituciones, dejó en jaque al sistema sanitario del país. Más de 400.000 contagios y más de 4.000 muertes diarias, fueron los dramáticos datos de los registros durante días. Unos datos, que se pueden cuestionar, al tener en cuenta la dificultad de registrar casos en las zonas rurales más alejadas y en las zonas más deprimidas. Durante esos días, la saturación en los hospitales dejaba imágenes dantescas: camas compartidas; colas de enfermos en estado grave a las puertas de los hospitales; y carencia de oxígeno y medicinas. Una realidad más cruel aún, si tenemos en cuenta que India había estado exportando hasta el momento, tanto oxígeno como vacunas a otros países. Esta alarmante situación dio lugar a la aparición de un mercado negro de todos estos productos; al acoso y a la agresión, en no pocos casos, del personal sanitario y a muchos déficits en las ceremonias fúnebres de las miles de personas que perdieron sus vidas. A todas ellas, nuestro recuerdo, y a sus familias nuestro más sentido pésame.
Ante esta situación desde Sonrisas de Bombay iniciamos una serie de acciones de emergencia centradas especialmente en conseguir material para centros hospitalarios y de cuarentena. Aquí podéis consultar el listado de donaciones fruto de la colaboración con hospitales como el BKC Covid Center; Holi Spirit Hospital; Sion Hospital; el Naim Charitable Hospital; y el Mitha Nagar Quarantine Center. Principalmente hemos donado camas de cartón, concentradores de oxígeno, monitores, oxímetros, bolsas para cubrir cadáveres, mascarillas, tests, heparina y todo tipo de material, que se nos ha solicitado y hemos podido conseguir.
Jaume Sanllorente, nuestro fundador y Director general, nos envía un nuevo vídeo desde Bombay, informando sobre la situación actual de la pandemia en la India, su impacto en las comunidades con las que trabajamos y especialmente sobre nuestras acciones para apoyarlas y nuestra hoja de ruta a corto y medio plazo en esta #EmergenciaIndia.
Tras unas durísimas semanas la curva de casos ha empezado a frenarse. Pero este descenso ha venido acompañado de una proliferación grave de casos de hongo negro, blanco y amarillo, que suman complicaciones a un sistema sanitario estresado y que además no es universal. El tratamiento de esta dolencia, que en muchos casos afecta a personas con patologías previas no diagnosticadas o no tratadas, sitúa de nuevo en el ojo del huracán a las personas en situación de exclusión social como colectivo de riesgo.
Si fijamos la mirada en las comunidades más desfavorecidas, sigue siendo fundamental la lucha contra el hambre, derivada de la imposibilidad, para muchas personas y familias que viven al día, de salir a buscar trabajo. Así como, el cuidado de tantísimos niños y niñas que se han quedado huérfanos debido a las muertes que deja la pandemia. Un riesgo absoluto para ellos, si tenemos en cuenta el acecho de las mafias para explotar a menores que están muy desprotegidos o para lucrarse con adopciones en el mercado negro.
En Sonrisas de Bombay apostamos por centrar nuestros esfuerzos en informar a las comunidades y en el testeo y la vacunación masiva. Como dice Jaume Sanllorente, fundador y Director general de Sonrisas de Bombay, “Estamos firmemente convencidos de que solo podemos evitar el desastre de una posible tercera ola, con una vacunación masiva. Muchas personas no conocen los recursos existentes para prevenir o tratar la enfermedad, o no tienen manera de acceder a ellos, o directamente aún no conocen la enfermedad. Por ello es necesario ir puerta por puerta para informar a las comunidades de las zonas en las que trabajamos y ofrecerles información y recursos, que permitan el control de casos, su atención, y la vacunación. El nivel de desconocimiento sobre la covid-19, en muchas comunidades, es alarmante.”
Actualmente la India ha vacunado a un 3,3% de la población, pero conseguir la inmunidad de grupo, en un país con más de 1.366 millones de habitantes, puede ser muy lento. Por lo que es necesario facilitar al máximo este proceso. Lo es a pesar de los trámites que requiere, difíciles de realizar para la población con menos recursos, y a pesar también de que las vacunas no son gratuitas y de que su coste varía en función de las marcas y de si los centros son públicos o privados. Es fundamental facilitar el acceso a las mismas y hacer pedagogía entre la población para fomentar la voluntad de vacunarse. Esta es a menudo una opción impopular por diferentes factores como el desconocimiento, los bulos o la falta de recursos.
A todo esto, sumamos las primeras horas de la desescalada del confinamiento, que nos vuelven a dejar imágenes de aglomeraciones y con ausencia de las medidas necesarias para prevenir el contagio de la enfermedad, acompañadas de fuertes lluvias, por el inicio de los monzones. Por todo ello, desde Sonrisas de Bombay seguiremos trabajando en las acciones de #EmergenciaIndia y en la búsqueda activa de recursos para financiarlas.
Gracias a todas las personas, empresas, colectivos e instituciones que estáis apoyando nuestras acciones en esta emergencia. ¡Vuestra ayuda está salvando vidas, os necesitamos!
