Las chicas de Comunicación de Sonrisas de Bombay

Hoy queremos presentaros a Anna Espelt y Ania Saternus, estudiantes de Ciencias Políticas y de la Administración en la Universidad Pompeu Fabra. En estos momentos compaginan sus estudios con las prácticas en el departamento de Comunicación de Sonrisas de Bombay. Desde la Fundación entendemos estos convenios de colaboración, como una forma más de fomentar una manera de trabajar y una red de instituciones y agentes enmarcada en los valores implícitos, en  la defensa de los Derechos Humanos.

¿Por qué has escogido una ONG de Cooperación y Desarrollo para realizar las prácticas universitarias?

Ania: Desde hace bastante tiempo tenía claro que quería realizar las prácticas en una ONG, por eso al ver la oferta de prácticas de mi universidad de Sonrisas de Bombay, enseguida llamó mi atención. De hecho, fue la primera oferta a la que decidí presentar mi candidatura y la principal en la lista de mis prioridades, por eso me alegré mucho cuando Isabel del departamento de Comunicación se puso en contacto conmigo.

Anna: Pues la verdad es que nunca me había planteado dónde hacer las prácticas exactamente, sólo sabía que quería hacerlas en una empresa de carácter social. Por eso, como mi compañera Ania, cuando vi la oferta de Sonrisas de Bombay en la bolsa de trabajo de mi universidad mandé la solicitud. ¡Y me alegro mucho de haberlo hecho!

¿Qué esperas de estas prácticas más allá de aprender el funcionamiento de un departamento de Comunicación?

Ania: He decidido hacer las prácticas en una ONG, porque aparte de desarrollarme personal y profesionalmente, me gustaría aportar mi granito de arena para mejorar la calidad de vida de otras personas. Creo que el trabajo que hace el departamento de Comunicación es muy importante para poder conseguirlo, ya que da a conocer la acción de la Fundación a los demás, cosa que es imprescindible para que la organización pueda disponer de un apoyo necesario para llevar a cabo sus proyectos.

Anna: De estas prácticas espero mejorar profesionalmente, adquirir conocimiento no sólo sobre las tareas que se realizan en el departamento de Comunicación si no del funcionamiento de la organización en general. Pero como bien ha dicho Ania, también espero mejorar personalmente, creo que trabajar en una ONG hace que adquieras valores solidarios e incluso te conciencies sobre una realidad que existe y en la que se debería actuar.

Describe tu día a día en Sonrisas de Bombay.

Anna: Pues… lo primero que hacemos al llegar a la oficina es saludar a todos los compañeros, es una de las cosas que más nos gustan de trabajar aquí, el ambiente de trabajo.  Lo hemos comentado entre nosotras varías veces.

Ania: Normalmente coincido con Anna, así que nuestro día a día es bastante similar. Solemos empezar el día repasando el progreso de las tareas con Isabel, que nos ayuda a dejarlo todo perfecto y nos enseña trucos para mejorar lo que estamos haciendo. Además, normalmente cada día recibimos alguna tarea nueva. Durante estos meses hemos podido aprender bastantes tareas típicas del departamento de Comunicación.

De todas estas tareas que realizas, ¿con cuál te quedas?

Ania: Lo que más estoy disfrutando es redactar las noticias del blog de Sonrisas de Bombay. Aparte de ser una tarea muy creativa que disfruto porque siempre me ha gustado escribir, me permite conocer con bastante detalle el trabajo que realiza la organización en el día a día en Bombay.

Anna: Mmm… Pues realmente no puedo escoger ninguna tarea, en realidad lo que me gusta es realizar tareas nuevas y aprender de ellas para aprovechar al máximo mis prácticas.

¿Qué destacarías de esta ONG de cooperación y desarrollo?

Ania: Me gusta mucho el carácter transversal de los proyectos de Sonrisas de Bombay, es decir, que aborden varios aspectos de vida de las personas con las que trabaja la Fundación. Pero lo que más ha llamado mi atención es la gran importancia que se da a promover la igualdad de género en todos los proyectos. Creo que es algo muy importante dada la posición aún más desfavorecida de las mujeres en estas comunidades.

Anna: En primer lugar destacaría su historia, como empezó, fue una de las cosas que más me chocaron al conocer la ONG. Por otro lado, su filosofía como ONG, me acuerdo de una frase que me dijeron cuando tuvimos una reunión al principio de las prácticas para conocer Sonrisas de Bombay: nosotros no trabajamos “para” la comunidad, trabajamos “con” la comunidad. Para mí es una de las cosas que destaca en Sonrisas de Bombay, los valores que aporta como entidad.

¿Qué es lo que más te ha impactado de la realidad de la India?

Ania: Creo que lo que más me ha impactado es lo difícil que es para las personas que viven en los slums salir de la situación de precariedad en la que se encuentran. Por esto creo que es muy importante el esfuerzo que hace Sonrisas de Bombay intentando implicar a las comunidades en los proyectos y empoderar a las personas con las que trabajan para que ellas mismas sean capaces de mejorar su situación, la de sus familias y la de la comunidad en general. Creo que es esta la única manera de romper este círculo de pobreza.

Anna: En estos meses que llevo aquí he podido comprender de primera mano la realidad de la India, creo que es un plus que también da el departamento de Comunicación, sensibilizar sobre el trabajo que hacemos y que es importante. En este sentido, lo que más me ha impactado de la India es que es una ciudad de contrastes, dónde hay mucha riqueza pero también mucha pobreza, a parte, por supuesto, de la existencia de múltiples tratos discriminatorios por: ser pobre, menor de edad y mujer.

¿Qué le dirías a alguien que está pensando en realizar prácticas o ser voluntaria en una ONG?

Ania: Se lo recomiendo a cualquier persona a la que le interese aprender y al mismo tiempo aportar algo a los demás. Además, a cualquier persona con expectativas parecidas le recomendaría realizar un voluntariado o prácticas precisamente en Sonrisas de Bombay, donde he sido acogida de forma muy cordial por todo el equipo y que sin duda ha cumplido con estas expectativas. Yo misma, aun cuando termine las prácticas, estaría encantada de poder seguir colaborando con la Fundación como voluntaria.

Anna: No sé, creo que debe ser la persona quien lo decida por sí misma. Pero sí que puedo hablar de mi experiencia en Sonrisas de Bombay y en este sentido ha cumplido todas mis expectativas. Me he sentido muy integrada y muy a gusto, además, por saber que las pequeñas cosas que hacen tanto las personas responsables de los departamentos como los voluntarios y estudiantes en prácticas, ayuda a mejorar la situación de miles de personas en los barrios slums de Bombay.

¡Muchas gracias por vuestra interés e ilusión! Una vez más la experiencia confirma que estas colaboraciones son realmente muy provechosas. Un placer trabajar con vosotras 🙂