Conozcamos un poco más a Pramila y su trabajo en Udaan

Hace unas semanas os presentamos a Pramila, quien había comenzado a trabajar como cuidadora en la casa de acogida Udaan para mujeres que han conseguido huir de la trata y están en proceso de recuperación.

¿Cómo ha sido hasta ahora tu experiencia en Sonrisas de Bombay?

Estoy trabajando aquí desde diciembre de 2021 y en este, relativamente corto, periodo de tiempo de 3 meses, puedo decir que siento que Udaan es mi hogar. Estoy disfrutando de mi trabajo y estoy haciendo lo que siempre quise hacer.

Pramila, ¿cómo es el día a día en Udaan?

Soy cuidadora a tiempo completo de estas mujeres que han sobrevivido a la trata de personas y luchan para vivir una vida normal. Mi trabajo no es solo realizar actividades con estas mujeres, sino también tener una buena relación con ellas para comprender sus problemas físicos y mentales.

Comenzamos el día practicando yoga. Todas las mujeres de la casa son muy activas y se motivan unas a otras para participar. Después de la sesión de ejercicio, tenemos planificadas actividades diversas para todos los días de la semana. Tenemos un sastre profesional en nuestro equipo que les enseña a coser, medir y todos los detalles de la sastrería. Algunas de ellas son realmente muy buenas y quieren continuar en la costura como profesión.

Otros días aprendemos jardinería. Esta actividad nos ayuda a desarrollar la paciencia. Todas son muy cuidadosas con las plantas e incluso conseguimos cultivar verduras para cocinar.

Por la tarde, algunos días tenemos sesiones de salud mental, o de Life Skills Empowerment (desarrollo de habilidades) o higiene personal, que les ayudan a entenderse y conocerse a sí mismos y también a entender mejor la vida de sus compañeras. Todas tienen un pasado complicado, y han sufrido, por lo que estas sesiones les ayudan a entenderse a ellas mismas y a sus compañeras.

¿Qué parte de tu trabajo te gusta más?

Siempre he querido trabajar con mujeres de comunidades vulnerables para compartir mis conocimientos sobre el VIH y crear conciencia entre ellas. Cuando comencé a trabajar, solo era una cuidadora, pero poco a poco, al ir sumando sesiones y al ir conociendo a cada una de ellas, pude entenderlas mejor y creo que también comenzaron a confiar en mí y a compartir sus problemas conmigo. Ahora, me siento como si fuera su hermana y ya no una cuidadora.

¿Cuáles son tus planes de futuro?

Me gustaría seguir trabajando con estas mujeres y quiero verlas crecer con confianza y siendo autosuficientes. Siento una gran satisfacción al ver crecer a la familia Udaan con la ayuda de tantas personas. Estoy agradecida a Sonrisas de Bombay por darme esta oportunidad.

¡Gracias a ti, Pramila, qué gran fichaje!