¿Será el desconfinamiento el fin del problema?

Como sabemos, los efectos de la pandemia de la COVID-19 van más allá de la salud. Nos hemos visto afectados emocional, pero también económicamente.

En el caso de Bombay el impacto ha sido durísimo. Esta es una ciudad de oportunidades, una ciudad -que en condiciones normales- recibe semanalmente a cientos de personas que persiguen sus sueños. Sueños que a menudo pasan por poder trabajar para poder comprar comida.

Con el fin del confinamiento, la actividad ha vuelto a las calles de la ciudad, y muchos trabajadores y trabajadoras que huyeron de esta hacia sus ciudades y pueblos de origen en busca de ayudan, han vuelto a Bombay para retomar sus vidas, o lo están intentando.

Durante este tiempo, las personas que quedaron atrapadas, sin trabajo, sin ingresos, y en muchos casos sin hogar, han recibido la ayuda de instituciones y ONGs, que como desde Sonrisas de Bombay, impulsaron acciones de emergencia.

Hemos apoyado a niños y niñas de familias de la calle; a mujeres víctimas de la trata; hemos extendido la ayuda más allá de las comunidades con las trabajamos habitualmente, repartiendo kits básicos de comida y productos de higiene; hemos repartido menús; y hemos adaptado los parvularios en albergues.

Pero como decíamos también hemos ido más allá. Nuestro equipo ha recorrido las calles, y hemos actuado en  zonas como Wadala, Borivali y Wadi Bunder, donde han acampado las familias de trabajadores migrantes que han perdido sus trabajos y sus casas. Sus condiciones son muy duras y en muchos casos los menores sufrirán con más gravedad estas consecuencias al verse obligados a buscar alguna manera de ganar dinero. Estas familias están viviendo realidades auténticamente estresantes, con la amenaza del coronavirus en sus espaldas. Estamos a su lado, te necesitamos también a su lado para conseguir que sus condiciones mejoren pronto, porque todo apunta que el fin del desconfinamiento no será suficiente. Puedes colaborar ahora con una donación o hacerte socio o socia colaboradora de Sonrisas de Bombay. ¡Vamos a seguir #TransformandoFuturos!