La nutrición, una pieza clave del proyecto Life Skills Empowerment

Las 50 chicas que participan este año en el programa de Life Skills Empowerment, llevan más de un mes con las actividades del nuevo curso. Muchos meses por delante para poder trabajar con estas adolescentes, desde diferentes campos, para que puedan desarrollar al máximo sus capacidades y hacerlo de la manera más saludable posible, respecto a ellas y respecto a su relación con el entorno.

Uno de estos campos es el de la salud. A menudo sus dietas son muy poco nutritivas. Las causas de esto son diversas: provienen de familias con pocos recursos, hay mucha carencia de información, existe también una tendencia a alimentar mejor a los chicos que a las chicas, etc. En definitiva una causalidad múltiple que varia en función de los casos. La realidad es que las familias poco a poco van cambiando actitudes y creencias, pero es bien cierto que hay que trabajar para que determinadas praxis, poco saludables e incluso discriminatorias, queden definitivamente en desuso.

En este sentido desde LSE contribuimos con sesiones informativas sobre nutrición y sobre cómo trabajar los aspectos relacionados con las familias, y también con una comida saludable al día. Esta actividad la llevan a cabo las mujeres de los grupos autogestionados con las que trabajamos que planifican los menús semanalmente, adecuados a sus consumidoras, con el objetivo de garantizar que estas tengan una dieta equilibrada.

En colaboración con el equipo de Salud comunitaria se organizan las revisiones médicas y las analíticas necesarias para confirmar que la evolución de los indicadores de salud de las chicas es la deseada.

Durante los últimos tres años, la empresa hotelera Courtyard Marriott ha estado colaborando con el proyecto aportando snacks de fruta deshidrata. Hace unos días tuvo lugar la festiva sesión en la que cuatro responsables visitaron a las chicas para conocer a las participantes de este año e intercambiar información.

Ese día todas disfrutaron mucho, al final de la sesión Amita nos decía ” Nos sentimos muy bien participando en estas actividades por las tardes. Aprendemos muchas cosas y de manera divertida. También conocemos gente nueva que nos muestran diferentes opciones de futuro. Personalmente, ahora estoy convencida que llegaré a ser médico. Y hoy he vuelto a aprender cosas nuevas“.

Sin duda, una satisfacción escuchar estas palabras en boca de Amita.