Día Internacional de la Niña: Rubina

En el Día Internacional de la Niña queremos poner el foco en los desafíos que afrontan las niñas de las comunidades con las que trabajamos. Estos desafíos son muchos y con distintas caras, pero todos tienen un denominador común: la pobreza y la vulnerabilidad a la trata de personas.

Esta es la historia de Rubina. Esta joven de 16 años es una buenísima estudiante de ciencias, que destaca también en arte y manualidades. Inteligente, divertida muy humilde, pese a lo que brilla. Es muy bien organizada y tiene una idea clara: tener un gran futuro profesional para poder ayudar a su familia, a su madre y a su hermano.

Hasta aquí más allá de las habilidades de la joven podría parecer que su vida se desarrolla con normalidad. Vive con su madre, que de se dedica a hacer postales artesanales y con su hermano que también estudia. Y es aquí donde todo se tuerce: hace diez años que los tres viven en la calle. Pese a trabajar y pese a estudiar, es donde acabaron cuando tuvieron que huir de un padre y un marido, con problemas de alcoholismo que los maltrataba.

Rubina tiene problemas de visión, y es aquí donde su vida se cruza con Sonrisas de Bombay, que la estamos apoyado para que tenga acceso a un diagnóstico y a sus medicamentos.

Pero este no es el mayor problema al que se enfrenta, pese a ser difícil. El mayor problema es evitar caer en manos de las mafias de trata de personas, ya que ella y su familia son un blanco fácil. Ahora gracias a haber participado en las sesiones informativas que organizamos en las escuelas y con las familias con las que trabajamos tienen más información para evitarlo.

En Sonrisas de Bombay seguiremos a su lado y al de todas las niñas que podamos para evitar nuevos casos y rescatar a aquellas que ya sean víctimas de la trata, con el objetivo que pasen a ser supervivientes con un futuro.

Una de cada tres víctimas de la trata son niños y niñas.

Colabora: #rompeconlatrata