Conclusiones del ciclo “Bombay en acción: enfermedades olvidadas”

Desde Sonrisas de Bombay queremos compartir con todas las personas que no pudieron asistir el pasado martes y miércoles a las conferencias del ciclo Bombay en acción, las principales conclusiones de las exposiciones de los ponentes.

La verdad que las sesiones fueron muy interesantes, y queremos agradecer a las y los ponentes su dedicación, así como a todas y todos los asistentes, por hacer de este espacio, una plataforma de debate y propuesta. El próximo Monográfico recogerá los principales temas tratados, pero queremos haceros un avance:

Lejos de lo que podemos pensar la lepra está presente en muchos países, existen bolsas de personas que la padecen en aquellos países donde esta es endémica. En el caso de la India, el país aglutina el 55% de los casos de lepra de todo el mundo, a pesar de que en el año 2005 el gobierno declarase, que este ya no era un problema de salud pública. No hay que perder de vista que la lepra es una enfermedad curable. Se conocen casos desde el año 1.500aC, pero no es hasta 1941 cuando se obtiene el primer medicamento eficaz. Hoy en día con la terapia multidroga, se obtienen resultados muy positivos.

Las personas afectadas no sólo por la lepra, sino por otras enfermedades olvidadas como la enfermedad del sueño, el chagas, o la
leishmaniasis, suelen ser las personas con menos recursos y que viven en una situación de exclusión social. Existe una clara relación entre estas enfermedades y la pobreza. Así que estas enfermedades no tienen sólo una dimensión médica, sino también social.

Existe una clara vinculación entre la salud y la educación. También el mercado juega un papel clave a la hora de luchar contra estas
enfermedades. Es necesario que se investigue y se produzcan medicamentos, aunque estos vayan dirigidos a enfermedades que afectan a las personas con menos poder adquisitivo. Estamos hablando de una cuestión de responsabilidad social y política en la que hay muchos actores implicados. A menudo, esta situación se da en países que al mismo tiempo son grandes productores de medicamentos, y en cambio muchos de sus ciudadanos y ciudadanas no pueden acceder a la medicación que necesitan. En muchos casos, se dejan de lado estas enfermedades y la industria se centra en producir medicamentos que pueden ser mucho más
lucrativos en los países del norte, a la vez que mucho menos necesarios.

Por otra parte, estas enfermedades suelen ir acompañadas de un estigma social. Es fundamental impulsar campañas de sensibilización para romper tópicos y prejuicios y promover la rehabilitación y reinserción social de estas personas. Es importante enmarcar esta problemática de salud y social en un contexto de Derechos Humanos y entender el derecho a la salud como tal, y ser conscientes de la gravedad de la vulneración de este derecho para millones de personas en el mundo.

Pero más allá de este diagnóstico, hemos podido ver el gran trabajo que muchos agentes sociales están llevando a cabo, con el apoyo de muchas personas movidas por el valor de la solidaridad. Y una vez más, poner el acento en la importancia del trabajo en red para sumar esfuerzos.