Blog
Conoce a Xavi Andrés
Xavi Andrés
28 años
Soy profesor de música e idiomas, y además intento mantenerme ligado al mundo de la comunicación audiovisual.
¿Cuándo empezaste a hacer de voluntario?
Empecé pasado un tiempo de haber visitado por segunda vez los proyectos en Bombay, hace unos años ya. También leí el primer libro de Jaume Sanllorente, y todo ello me volvió a impactar. Cabe decir que mi hermana se adentró totalmente en el mundo de Sonrisas y estoy contento de que me arrastrase.
¿Por qué decidiste participar en Sonrisas de Bombay?
Porque los proyectos me parecieron interesantes y, sobre todo, porque cuando pude vivir de primera mano la realidad en Bombay, pensé que desde aquí podía hacer algo, aunque sólo fuera vendiendo los productos de la ONG o bailando para una flashmob con el objetivo de hacer difusión.
¿Qué es lo que has aprendido / conocido de la realidad de las comunidades con las que trabajamos que te ha sorprendido más o llamado más la atención. Algo que desconocías o que creías que era diferente?
Una de las cosas que siempre destaco es la manera de vivir que tienen respecto a la nuestra. Es cierto que hay gente que dice que si nos movemos por nuestro país también podemos encontrar gente que vive en unas circunstancias similares y con mucha necesidad. Pero en la mayoría de casos aquí tenemos mucho más acceso a la información, lo que allí seguramente no se da con la misma facilidad. La falta de recursos no siempre supone un obstáculo para la felicidad de las comunidades de Bombay, pero eso no nos debe hacer pensar que entonces no es necesario mejorar sus condiciones de vida.
Seguramente he aprendido a ser un poco más empático y a valorar todo lo que tengo, a ser más solidario y, en definitiva, a ser mejor persona.
¿Cuál de los proyectos que hemos llevado a cabo durante estos diez años destacarías y por qué?
Seguramente, como profesor que soy, me gustan mucho los relacionados con la educación, tanto los balwadis como la escolarización posterior. Sin embargo, hay otros proyectos que tienen un componente educativo de forma implícita, como los de sanidad o los de sensibilización. En realidad veo que todos los proyectos nacen con una idea de cambio y de conciencia de la población india para mejorar sus condiciones de vida. Tanto el proyecto SEED con la formación profesional de las mujeres como el proyecto Yashodan son fundamentales para garantizar la igualdad de las personas.
Por otra parte, también creo que es una iniciativa muy buena dar a conocer Sonrisas de Bombay en las escuelas de aquí. Los adolescentes son un público bastante permeable que también puede colaborar en la eliminación de las diferencias en la India y en su desarrollo.
¿Qué le dirías a alguien para que se decidiera a hacerse socio de Sonrisas de Bombay?
Antes que nada, que se informe de la ONG a través de cualquiera de las vías que se ofrecen: charlas o conferencias, exposiciones, lectura de los libros, la página web o por medio de alguna de las acciones en las que participa Sonrisas de Bombay. Antes de colaborar en ningún proyecto, debes saber dónde inviertes tus esfuerzos, esto te ayudará a sentirte miembro de esta gran familia y a sentir cada uno de los retos y metas como propias.
Si un día puede, que visite el país para conocer in situ cómo es y así vivir todo en primera persona.
Y por otro lado, si el tiempo se lo permite, participar como voluntario aquí, porque conocer el equipo de gente que hay detrás de Sonrisas de Bombay y conocer otros voluntarios que se han animado en el mismo proyecto que tu es bastante satisfactorio. De cada vez que he participado me llevo una experiencia positiva nueva (además de reír mucho, porque en Sonrisas, humor no falta).