El programa de Salud materno-infantil que llevamos a cabo registra a 3.222 nuevas participantes

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la mortalidad materna es inaceptablemente alta. Cada día mueren en todo el mundo unas 830 mujeres por complicaciones relacionadas con el embarazo o el parto. En 2015 se estimaron unas 303.000 muertes de mujeres durante el embarazo y el parto o después de ellos. Prácticamente todas estas muertes se producen en países de ingresos bajos y la mayoría de ellas podrían haberse evitado. A pesar de que la OMS indica que en los últimos años estas cifras se han ido reduciendo, los resultados continúan siendo alarmantes. El Banco Mundial apuntaba que en India, en 2015, la cifra era de 174 por cada 100.000 nacidos vivos, mientras que en 2010 era de 215 por cada 100.000 nacidos vivos.

Es en este contexto en el que se desarrolla nuestro proyecto de Salud materno-infantil, que impulsamos con la ONG ARMMAN. Un proyecto que acompaña a las mujeres embarazadas y lactantes de los barrios de chabolas en los que trabajamos. Este acompañamiento lo realizamos mediante un servicio de mensajería telefónica y con el trabajo de calle de un grupo de mujeres formadas para ofrecer asesoramiento y realizar un registro y seguimiento de las participantes.

Se ofrece información sobre los programas que la administración impulsa para que la maternidad sea lo más saludable posible; información sobre las visitas al médico y las diferentes fases de la maternidad y la crianza; sobre nutrición e higiene; y también sobre lactancia.

El trabajo puerta a puerta de las Aarogyasakhi es fundamental para que las participantes se sientan acompañadas, para tener un registro actualizado de su situación, y para tener un retorno de las acciones que se llevan a cabo.

Este es un proyecto que tiene una gran acogida, desde abril a junio de 2017 registramos a 3.222 nuevas participantes. En definitiva, contribuimos con este trabajo comunitario a avanzar en el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3, que consiste en reducir la Ratio de Mortalidad Materna mundial a menos de 70 por cada 100.000 nacidos vivos y lograr que ningún país tenga una mortalidad materna que supere el doble de la media mundial.

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